El régimen dictadorial de La Habana
acaba de anunciar que para el 14 de enero próximo se eliminará la Carta o
Tarjeta Blanca, que es una especie de salvoconducto que los cubanos
deben pedir antes de salir de viaje, pago mediante, por supuesto, y la
que no siempre es otorgada, más bien casi siempre es denegada. Al
parecer la Tarjeta Blanca no existirá más, pero las medidas represivas
se traducirán de otro modo, por ejemplo, en un cuño en el pasaporte de
autorización por parte del Ministerio del Interior, lo que viene a ser
lo mismo, pagando incluso.
De eliminar las visas de entrada al país por parte de los exiliados ni
se ha mencionado siquiera, y mucho menos la eliminación del pago del
Permiso de Residencia en el Extranjero que es un abuso inaguantable
cometido por uno de los regímenes más abusadores que haya conocido la
humanidad.
Total, que 53 años después, los cubanos se encuentran en la misma
encrucijada, en la de la imposibilidad de viajar que es una de las
tantas encrucijadas impuestas por la falta de libertades, cero
democracia, represión, asesinatos políticos, desapariciones y
encarcelamientos. El pueblo continúa viviendo en la miseria y sumido en
el terror, de ahí que prefieran viajar antes que seguir viviendo en el
horror castrista.
Sin embargo, al mismo tiempo, al parecer las víctimas necesitan del
verdugo para poder retomar fuerzas, porque según las encuestas, los
cubanos lo que ansían es viajar y pasear, y regresar a Cuba. Tal como lo
ha expresado la bloguera Yoani Sánchez, que ella misma haría, ella
regresaría para seguir blogueando y pidiendo internet, que es lo único
que a ella no le cuadra: No poder viajar y no tener internet.
O sea, que la libertad no es lo primordial para estos cubanos.
Supongo que otra inmensa cantidad de cubanos dentro de Cuba y en el
exilio no piense de tal modo, pero eso no le importa a la prensa mundial
mayoritariamente de izquierda, que lo único que le importa es aquellos
personajes que le hacen el juego al castrismo, presentándose
mundialmente con el apoyo del gobierno de Obama como la socialdemocracia
cubana o la nueva izquierda.
La verdad es que yo, a todas estas, si fuera un congresista
cubanoamericano, lo que haría es exigir desde ahora la eliminación total
de la Ley de Ajuste Cubano en Estados Unidos, puesto que esa ley se
creó para ayudar a los cubanos que huían del castrismo, o sea para los
verdaderos luchadores por la libertad, y no para aquellos que sólo
quieren viajar, pasear, y regresar al redil, como los carneros en los
que ha convertido el castrismo al pueblo cubano.
Cero Ley de Ajuste Cubano y por lo tanto cero invasión silenciosa de los
comunistas a Estados Unidos, ni de los arrastrapanza castristas. Sobre
todo porque ahora, cualquiera que tenga un pasaporte podría entrar a
través de un segundo país, en Estados Unidos, que es lo que está
ocurriendo desde España, de manera masiva, y sin control de ningún tipo.
Gracias a Zapatero y a Obama.
Tanto que nos vendieron que irían a ser los norteamericanos los que
invadirían Cuba, uy, qué miedo que viene el lobo, los bárbaros, y está
sucediendo todo lo contrario, son los castrocomunistas los que están
invadiendo a Estados Unidos, y ya sabemos que éstos son iguales a las
termitas, donde caen se comen la cal y el muro entero. Derrumbe
asegurado.