Angélica Mora
Texas
Apuntes de una Periodista
Angélica Mora
Texas
Apuntes de una Periodista
No es bueno pensar mal, pero ante el mal no queda otra alternativa.
Lo ocurrido en mi patria -saqueos y pillaje luego del terremoto- no tiene una explicación muy clara y quizás es que los chilenos presumíamos y nos enorgullecíamos demasiado de nuestro civilismo.
Para muchos, haber ganado en las elecciones pasadas y haber elegido como presidente a un hombre diametralmente opuesto al gobierno actual, se estimó como un triunfo natural y un paso directo hacia un futuro diferente. No se sabía lo difícil que sería y menos aún que venía un episodio con que nadie contaba -el terremoto- 12 días antes de asumir el cargo el nuevo mandatario.
Resulta que los elementos negativos estaban ahí, agazapados esperando para dar un salto y demostrar lo frágil que somos en el terreno de personas civilizadas.
Hay un libro, que leí justamente en mi niñez en Chile y que me impactó mucho. Se llama "La Psicología de las Masas" y analiza el comportamiento humano frente a un acontecimiento; y cómo el individuo como tal, pierde su identidad para sumarse a la ola general, que barre con los sentimientos básicos en determinado momento.
La anarquía de estos días en Chile logró levantar un demonio que borra siglos de civilización y convierte al hombre sin autoridad en un ente sin frenos. Por eso, los chilenos, luego que saquearon, quemaron también los establecimientos y negocios al verse sin sujección... y libres de obrar a su antojo.
Las reglas del juego de la civilización se rompieron en Chile en esta ocasión por la falta de liderazgo e incompetencia.
Les aseguro que con el general Augusto Pinochet estos hechos no hubieran ocurrido. Ese submundo que salió al pillaje lo habría pensado dos veces.
Ricos y pobres salieron a robar, porque no había autoridad que se los impidiera.
La ley de la selva primó y nunca se aplicó la ley contraria que es la del orden.
Muchos resentidos salieron al pillaje en una forma de burla al voto que cambió los destinos de la nación.
Cientos salieron instruidos por las bases del partido para hacer daño al país y entregárselo desprestigiado al nuevo presidente. Se ha visto esta actitud de desamor a la Patria en los regímenes izquierdistas, que rompen y se roban todo, en el último minuto, cuando se ven obligados a entregar el poder.
Tengo base para decirlo: Me han llegado fotos, videos y artículos mostrando este rostro amargo de Chile, provenientes de personas y entidades izquierdistas de mi mismo país, mofándose de lo ocurrido.
Yo no me pregunto que habría pasado si hubiera asumido Sebastián Piñera la presidencia antes del terremoto. Estoy segura que las órdenes para ir en alivio de los damnificados se habrían cumplido de inmediato y las hordas nunca habrían salido a las calles para realizar el pillaje que hoy avergüenza al resto de los chilenos.
Miles han cumplido una labor encomiable en el salvamento de vidas luego del terremoto y ésta es la imagen que se habría visto internacionalmente.
Ahora sólo queda contar los días que faltan para el 11 de marzo para que se imponga en Chile un verdadero estado de derecho.
Lo ocurrido, los saqueos y el pillaje, quedarán en la memoria y nos harán más humildes, porque nos han enseñado la dura lección de que la maldad siempre está ahí y sólo requiere el momento oportuno, para mostrar su cara.
Y que paso?
ReplyDeleteFalta de poder y una presidenta ajena a sus deberes.....
Y puede que se haya permitido para dejarle al nuevo presidente un estado confuso y caotico.
El lastre de Bachelet!