CRETINADAS Y CRETINOS

Por Osvaldo Raya

EL AZUL DE MI MISMO

No, yo no miro con buenos ojos --y mi amor a Cuba no me lo permite-- la liberación de los presos políticos cubanos, luego de una maniobra que al cabo es un forcejeo para dar una imagen de flexibilidad y glamorosa dispocision al carcelero y al verdugo que precisamente les privó de la libertad. Eso de que no importa la via que se haya usado para obtener las excarcelaciones ni cómo ni a cual precio, me suena a aquel principio maquiavélico de que los medios justifican el fin. Y es que bien puede haber liberaciones que sean el resultado de la claudicación de algún reo o de algun sucio chantaje o engañosa negociación. ?Por que no sospechar de la posible existencia de un cambalache entre instituciones poderosas que se ponen de acuerdo para limpiar los vidrios enlodados y mohosos de las vitrinas y escaparates donde suelen mostrar al mundo sus ya dudosas bonanzas? Ningun patriota acepta lo indigno. La patria misma no lo acepta. Creo, tambien, que ningun cubano digno debe conformarse con luchar por conseguir del gobierno tiranico ciertas dadivas humanitarias, sino que no habra de descansar hasta obtener el derrocamiento de la tirania y la libertad definitiva de todos --todos-- los cubanos. Entonces si me importa y si puedo desconfiar y hasta condenar las concesiones indecorosas que manchen la pureza y dignidad de la causa por la cual fueron a prisión nuestros hermanos de lucha.

Precisamente el gobierno cubano, al verse apretadito y acorralado, en un acto de desesperacion, echo mano de la iglesia y de ese cardenal al que tienen agarrado por los testículos ‒porque no dudo que los de la secreta ya le han hecho saber que tienen en su poder una fotito o un videíto muy comprometedor o cualquier otra cosa que inhibe y silencia y que ademas somete. Nada, que la dictadora se apura en tener su cuartada ‒su cretinada‒ y espera por los cretinos que se la aplaudan.