Chávez no tiene a quién seguir en Twitter

M. ARRIZABALAGA | MADRID

Se debe sentir solo Hugo Chávez en las redes sociales.

El presidente de Venezuela se abrió el pasado martes una cuenta en Twitter, pero tres días después apenas ha escrito dos tuits (mensajes) y sólo sigue a otros cinco tuiteros: reflexionfidel (una cuenta en la que se vierten links a los artículos que Fidel Castro publica en Cuba Debate), el de su ministro Diosdado Cabello y el del también miembro de la Dirección Nacional de su partido Tareck El Aissami, la del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y el del Correo del Orinoco, también bajo su influencia. Chávez no busca informarse en twitter, al menos no desde una postura crítica.

Su objetivo es utilizar la red social «para la batalla ideológica» y para ello necesita aunar esfuerzos. Por ello invitó ayer a Castro y al presidente de Bolivia Evo Morales, de visita en Venezuela, a usar twitter: «Evo, te invito, te invito a que nos metamos en estas redes a lanzar mensajes y a recibirlos, también. ¡Vamos a la batalla ideológica en todos los espacios; revolución en todos los espacios!».

Aunque el gobernante venezolano ha aterrizado con cierta timidez en Twitter. A sus más de 100.000 seguidores curiosos que tiene registrados, @chavezcandanga sólo les ha dirigido un par de mensajes. En el primero, se presentaba coloquialmente con un «Epa que tal? Aparecí como lo dije: a la medianoche» y comentaba su viaje a Brasil antes de terminar con el «venceremos!» de rigor.

Veinticuatro horas después agradecía la «explosión inesperada» de los «candangueros y candangueras» que le siguen. El propio nombre de guerra que ha adoptado el dirigente venezolano ha suscitado multitud de mensajes en la red. Candanga se llama en Venezuela a una persona combativa y de fuerte carácter y es sinónimo de «diablo» en El Salvador y Honduras. Hasta ahí todo encaja, pero en Cuba también se traduce como «situación embarazosa que produce molestia» o «embrollo».

Chávez aseguraba ayer que el 99% de los mensajes que ha recibido son «de saludos, de reflexión y de mucho humor», aunque reconoció otros por parte de «víctimas del odio». «¡Pero qué me importa a mí si es un contacto con el mundo!», aseguró. «Agradezco mucho, incluso a quienes me insultan por ahí; yo les devuelvo este corazón que es para todos"», dijo y detalló que también ha recibido mensajes críticos por el solo hecho de usar «esta arma capitalista», según recoge Efe.

«Alguien decía que Chávez es capitalista porque usa esta arma capitalista, ¡Esto no es capitalista ni socialista, depende del uso que se le dé!», exclamaba ayer. Sin embargo, en febrero pasado el presidente venezolano lanzó duras críticas contra Twitter y calificó a todo aquel que estuviera en esta plataforma de «terrorista». Un mes después pidió a la Fiscalía General que actuara contra «delitos» en páginas web. «La Internet no puede ser una cosa libre, cada país tiene sus normas, la regulación y las leyes. Todas esas páginas tienen un administrador y hay que actuar en esto», dijo entonces Chávez. La oposición le acusó entonces de intentar «poner bozal» a internet.

Ahora pretende cargar contra la «desinformación» de medios privados contraatacando en la red. Su amigo en la red y ministro de Obras Públicas, Diosdado Cabello, uno de los hombres más cercanos a Chávez, ya alertó a la oposición que «cree que el Twitter y el Facebook son de ellos» de que van «a tomar por asalto» las redes sociales.